Por: Pastor, Rev. Dr. Rafael Carattini

Octubre 25, 2012

Tema: No Vendas lo que Dios te ha Dado

Lectura: Hebreos 12:15-17

Texto: Proverbios 23:23

 

Introducción: Algunas transacciones en la vida son irreversibles. Hay también en la vida un punto en muchas de las cosas que se hacen el cual no se puede regresar ni se pueden deshacer. En lo espiritual de igual manera hay un punto en donde no se puede recuperar lo perdido ni tampoco hay regreso, aunque se busque con lágrimas. Las lágrimas en este caso nada pueden resolver. Como en el caso de Esaú, el bocado de carne de su decisión despreocupada pronto terminó, pero las consecuencias no desaparecieron. El persistir en vender la santidad y salvación, el cual es nuestra primogenitura, por un potaje de lo mundano, nos llevará finalmente a la destrucción. Hay esperanza para el caído de la gracia, pero no la hay para el apóstata ni segunda oportunidad después de la muerte. Cuántos hay que descuidan la santidad, luego la menosprecian y terminan vendiéndola por el vil precio de una gratificación momentánea. No venda o cambie usted lo que Dios le ha dado por nada de lo que el mundo y la carne le ofrezcan (Prov. 1:10).

 

Punto 1. ¿Cómo se llamó el hermano mayor de Isaac? (Gén. 17:20) Se llamó Ismael. ¿Por qué fue echado Ismael y su madre de la casa de Abraham? (Gén. 21:9-10) Porque menospreciaba a el niño Isaac. ¿Cómo le cayó el pedido de Sara a Abraham acerca de echar a Ismael? (Gén. 21:11) Le dolió en el alma. ¿Quién confirmó el pedido de Sara? (Gén. 21:12) Dios confirmó el pedido de Sara. ¿Cómo se llamó el padre de Rebeca la esposa de Isaac? (Gén. 24:23-24) Se llamó Betuel. ¿De qué se consoló Isaac al recibir a Rebeca por esposa? (Gén. 24:67) Se consoló de la muerte de su madre.

 

Punto 2. ¿Cuántos hijos tuvo Ismael hermano de Isaac? (Gén. 25:16) Tuvo 12 hijos. ¿Qué petición le contestó Dios a Isaac? (Gén.25:21) La que oró por la esterilidad de su esposa Rebeca. ¿Cuántos hijos tuvo entonces la esposa de Isaac? (Gén. 25:24) Tuvo 2. ¿Qué le rogó Esaú a Jacob que le diera? (Gén. 25:29-30) Que le diera de comer del guisado rojo que había cocinado. ¿Cuál fue el precio que pagó Jacob por la primogenitura de su hermano Esaú? (Gén.25:31-33) El precio fue un simple plato de guisado rojo de lentejas. ¿Cuál fue la actitud de Esaú después de comer el potaje? (Gén. 25:34) Comió y bebió y se levantó y se fue despreciando así su primogenitura. ¿Cómo buscó Esaú la bendición años después? (Gén. 27:38;) La buscó con llanto, pero fue muy tarde.

 

Conclusión: Que la amargura que Esaú tuvo que pasar por haberle restado importancia a la bendición que poseía, sirva de solemne advertencia para todos. Pues eso le sucede a los que toman el mismo riesgo y renuncian a las bendiciones espirituales permanentes por la gratificación temporal de la carne con sus placeres. Recordad, que una vez se toma la decisión de ir donde no se debe, de hacer lo que no se debe y se actúa de acuerdo a ella, ya no es posible revertir los resultados o las consecuencias y las bendiciones que pudieron haberse recibido, se pierden para siempre. Por lo tanto, ocúpese de su salvación con temor y temblor, pues, ¿Cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande? (Fil. 2:12; Heb. 2:3). "Hijo mío, si lo pecadores te quisieren engañar, no consientas" (Prov. 1:10)